Ingredientes para 2 personas
– 4-6 Alcachofas medianas.
– 6 dientes de ajos.
– Jengibre fresco (opcional).
– Aceite de oliva, pimienta negra, perejil y sal.
1. Cortar el tallo de las alcachofas dejando una base estable para que se mantenga recta en vertical. Golpear varias veces la parte superior de las alcachofas para abrirlas y pasarlas bajo el chorro de agua fría.
2. Podemos preparar la receta usando el jengibre fresco o podemos prescindir del mismo. Si usamos el jengibre fresco, usaremos un pequeño trozo del tamaño aproximado de una nuez y lo rallaremos.
3. Pelar los dientes de ajo y cortarlos a dados pequeños. Mezclar los ajos cortados con el jengibre fresco (opcional) rallado en un mortero. Incorporar el perejil cortado, la pimienta negra y sal al gusto. Añadimos por último el aceite hasta obtener una pasta.
4. Introducir un par de cucharaditas de la pasta realizada en cada alcahofa. Añadir un poco más de aceite de oliva por el exterior de las alcachofas.
5. Hornear las alcachofas durante 1 hora a 180º. Dependiendo del tamaño de las alcachofas podemos aumentar el tiempo en el horno, hasta ver que las hojas exteriores se han secado y oscurecido.
6. Desechamos las hojas exteriores más negras y disfrutamos del corazón tierno de las alcahofas.
Tiempo de preparación: 1 hora y media.
Nivel de dificultad: Baja.
Comentario nutricional: Las alcachofas destacan por favorecer la digestión de los alimentos, en relación a la mejora del funcionamiento del hígado. También reducen el nivel de glucemia en la sangre, estando indicadas para el control de la diabetes, y contribuye a disminuir el nivel de colesterol.
Dispone de propiedades diuréticas y es rica en fibra, produciendo sensación de saciedad.
Aporta gran cantidad de minerales por lo que es ideal para contrarrestar la acidez y para cuidar de nuestros huesos y dientes.
El jengibre (ya sea freco como en polvo) y la pimienta negra son condimentos y especias que deben usarse de forma habitual en nuestros platos (ver artículo Consejos básicos para una dieta sana).
Los ajos son uno de los alimentos que aportan azufre, mineral imprescindible que debemos aportar de forma abundante y a diario en nuestra dieta.
